La Institución Educativa Escuela de la Palabra se compromete a ofrecer una educación formal con profundización en lengua de señas colombiana, en los niveles transición, primaria, secundaria y media, con estándares de excelencia académica, colaboradores idóneos y calidad en sus procesos directivos y administrativos, mediante la aplicación de estrategias de mejoramiento continuo y la satisfacción de usuarios.
La Institución Educativa no devolverá estudiantes solos para la casa, salvo eventualidades fuera de control
Las salidas pedagógicas con estudiantes tendrán nexo directo con el desarrollo del plan de estudios, institucional o con los proyectos pedagógicos, enmarcados en el PEI de la Institución Educativa y deben estar sujetas a las siguientes condiciones:
El objetivo fundamental de esta política es lograr un alto nivel de bienestar físico, social y mental en los empleados públicos que laboran en la Escuela de la Palabra, buscando reducir o eliminar la exposición a los riesgos laborales generados por las diferentes actividades normales del proceso laboral. Se logrará asignando líderes que direccionen y orienten las diferentes actividades, para garantizar la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades de tipo laboral.
La rectoría y todo el personal de la Institución Educativa Escuela de la Palabra, se compromete a cumplir e impartir las directrices para el cumplimiento de la normatividad vigente, garantizando el mejoramiento continuo de los procesos relacionados.
El COPASST debe estar conformado desde inicio del año escolar, con integrantes de ambas sedes y jornadas, de acuerdo con las normas establecidas y velará por el logro de los objetivos en el Tema de Seguridad y Salud en el Trabajo.
El autocuidado será una de nuestras principales banderas, y será asumido por todos como un compromiso permanente, que propenda por el bienestar de cada uno, en la prevención de riesgos relacionados con el trabajo.
En la agenda se recordará continuamente que debemos practicar el autocuidado y evitar situaciones que pongan en riesgo nuestro bienestar y el de los estudiantes, como evitar subirse en sillas y escritorios, subir y bajar las escaleras por la derecha siguiendo la marcación, conservar las aulas sin seguro durante las clases, mantener despejado las rutas de evacuación en todos los espacios institucionales, evitando toda acción de riesgo.
La capacitación y entrenamiento en la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades laborales, será de asistencia obligatoria para todos los docentes, directivos y administrativos. Se debe velar por el cumplimiento del plan de emergencia y las acciones direccionadas por el proyecto de gestión de riesgo (los simulacros los hacemos cada semana en los salones, cada 15 días con salida al patio y una vez al período con evacuación del Colegio), así como las responsabilidades asignadas por departamentos (Humanidades: Qué hacer mientras ocurre el evento, tener en cuenta que esto puede suceder en clase, en descanso, en la cancha o mientras hay desplazamiento de un aula a otra), Sociales: Desplazamiento hacia el lugar definido en el patio (ídem humanidades), Matemática: Desplazamiento hasta el lugar de encuentro, fuera del colegio (ambas sedes, en 2018, definimos cómo hacerlo en San Jorge). Ciencias: Capacitación (primeros auxilios, brigadas, demarcación); mantener actualizado, entrenado y capacitado el Comité de emergencias y las Brigadas de Emergencia.
La rectoría y las coordinaciones, exigirán el porte diario del carnet diario, así como de hacer recomendaciones sobre prendas y calzados adecuados para nuestra planta física, en procura del autocuidado y bienestar de los empleados.
La Política Nacional de Educación Ambiental: EN SU AGENDA INTERSECTORIAL DE EDUCACIÓN AMBIENTAL Y COMUNICACIÓN (2010-2014) Contempla dentro de sus objetivos: a) propiciar la concertación, la planeación, la ejecución y la evaluación–intersectorial e interinstitucional-, de las acciones de educación ambiental que se generen desde el Sistema Nacional Ambiental (SINA), y promover la institucionalización de la educación ambiental y su incorporación en el desarrollo local, regional y nacional, desde los diversos contextos ambientales del país, en el marco de sus realidades y dinámicas particulares de participación y gestión, y a partir de un trabajo coordinado entre las diferentes entidades y grupos de población, con competencias y responsabilidades en la problemática particular.
Considera que, para los propósitos de la educación ambiental, es fundamental una estrategia de comunicaciones que desencadene procesos de participación ciudadana en los asuntos ambientales, entendiendo, que la intención educativa de la comunicación debe estar orientada a contribuir en la formación de comunidades críticas y responsables frente a un manejo sostenible del ambiente, que se traduzca en una relación nueva de los individuos y de los colectivos entre sí, y con su contexto. Ubica a las secretarias de Educación Departamentales y Municipales (sector educativo), a las Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible (sector ambiental); así como a las demás autoridades ambientales de grandes centros urbanos, como responsables por excelencia de la incorporación de la educación ambiental en el ámbito territorial; esto con el acompañamiento efectivo de todas aquellas instituciones con competencia y responsabilidad en el tema específico.
Promueve lo consignado en el decreto 1743 de 1994, el cual específica que los Ministerios de Educación y Ambiente, como parte del Sistema Nacional Ambiental, acompañarán y participarán, conjuntamente con las demás instituciones gubernamentales, no gubernamentales y privadas que hacen parte del Sistema, en la puesta en marcha de todas las actividades que tengan que ver con la educación ambiental.
El objetivo de esta política es prevenir, controlar y mitigar los impactos ambientales del día a día de la Institución Educativa Escuela de la Palabra; el proyecto PRAE, liderará las acciones para dar cumplimiento a esta política, así como definirá los objetivos y metas de cada año, promoviendo la participación de toda la comunidad educativa y de influencia.
Teniendo en cuenta la normatividad vigente sobre la gestión ambiental, adoptamos las siguientes políticas ambientales:
La Política de Tratamiento y Protección de Datos Personales presentada a continuación, se aplicará a todas las Bases de Datos y/o Archivos que contengan datos personales y que sean objeto de tratamiento por La Escuela de la Palabra, considerado como responsable y/o encargado del tratamiento de los datos personales
El tratamiento que realizará la Escuela de la Palabra será el de recolectar, almacenar, procesar, usar y transmitir o transferir (según corresponda) los datos personales, atendiendo de forma estricta los deberes de seguridad y confidencialidad ordenados por la Ley 1581 de 2012 y el Decreto 1377 de 2013, con las siguientes finalidades:
Así mismo, la Escuela de la Palabra, suministrará los datos personales a terceros que le provean servicios o con quien tenga algún tipo de relación de cooperación, a fin de:
Como titular de datos personales, se tiene derecho a:
Para dar cumplimiento a la Constitución Política de 1991, artículos 2, 103 y 270, las leyes 136 de 1994, 115 de 1994, 489 de 1998, 617 de 2000, 715 de 2001, 1474 y 1450 de 2011, y el decreto 4791 de 2008, donde se establece la obligatoriedad por parte de todas las entidades y organismos de la administración pública de desarrollar su gestión acorde con los principios de democracia participativa y democratización de la gestión pública y de involucrar a los ciudadanos y organizaciones de la sociedad civil en la formulación, ejecución, control y evaluación de la gestión pública.
Y siendo coherentes con los objetivos de la rendición de cuentas que busca fortalecer el sentido de lo público, recuperar la legitimidad para las instituciones del Estado y facilitar el ejercicio del control social a la gestión pública principalmente, buscando comunicar y explicar a la comunidad educativa y a la sociedad en general, las acciones emprendidas para el mejoramiento de la educación, la escuela de la palabra:
La Institución Educativa Escuela de la Palabra, ha definido y establecido una política de no alcohol, tabaco y drogas, esto con el fin de promover, prevenir y fomentar el bienestar de los directivos, docentes, administrativos, estudiantes, familias y particulares que visitan las instalaciones físicas de la institución ya que esto genera impactos negativos sobre la sociedad, el ambiente de trabajo y en las personas en su seguridad y condiciones de trabajo, debido a sus factores de riesgo asociado.
Por lo tanto, con el ánimo de promover el mejoramiento del desempeño laboral y el fomento de los hábitos y estilos de vida saludable, teniendo en cuenta lo establecido en la resolución 1075 de marzo 24 de 1992 y la resolución 4225 de mayo 29 de 1992, resolucion 2646 de 2008 Se establece los siguientes parametros:
La Comunidad Educativa deberá tener una conducta responsable y participativa en las acciones de sensibilización que promuevan el cumplimiento de esta política
El incumplimiento de esta política y de las reglas o normas que se deriven de ella, es condición de llamados de atención y registro en su hoja de vida.